Este fin de semana hicimos un viajecito hasta la Selva Negra. Salimos viernes a la noche y volvimos el domingo a la tarde. El viaje no fue largo, desde donde vivimos son unos 300 km hacia el sur.
Disfrutamos mucho de la nieve! Mi marido esquió y eso fue lo que yo intenté hacer todo el sábado. De tantos intentos debo reconocer que los únicos músculos que NO me duelen ahora son los de las manos, así por lo menos puedo escribir!
No saben la cantidad de veces que me caí al suelo tomando las clases para principiantes. Saben qué fue lo más frustrante? Era la ÚNICA que me caía! En un momento hasta llegué a pensar que era un chiste de mal gusto!! Cómo puede la gente ir a tomar clases de esquí sin caerse? De todas formas, estaba aprendiendo, así que me reí de mi misma y le di para adelante con mucha actitud!
En fin, a pesar del muucho frío, disfrutamos del paisaje más parecido a Narnia que vi en mi vida. Acá les muestro algunas fotos. Mirenlas fijo a ver si llega un poco de frío a Buenos Aires :)
El centro de esquí.
Mi grupo, y yo en capucha fucsia, por si me perdía entre los pinos.
En frente a nuestro hotel estaba el Schluchsee, el lago más grande de la Selva Negra.
Lo que veíamos desde la ventana del hotel!
De película, no me digan!
Ahí en cualquier momento aparecía la Bruja Blanca
Espero que hayan sentido frío aunque sea por un ratito!!
Y no se olviden que este viernes hay sorteo!!!
Ya dejaron su comentario??
PD con yapa: si les gustan esas imágenes en movimiento que puse en los dos últimos posts, lo pueden hacer
acá. Es gratis y súper fácil!
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